Eva López Boluda es una mamá que ha querido compartir su historia con todas nosotras. Nos ha acompañado a lo largo de su historia y hoy se despide de nosotras. Si tú también quieres compartir la tuya puedes enviármela a esta dirección:
monica.alvarez@duelogestacionalyperinatal.com
En momentos de temor llegué a pensar que tal vez la vida me protegía no siendo madre porque mi hijo no naciera sano, tal vez me empeñaba en algo que no era correcto para mí pero tras estas dudas medité y me dije:” soy libre para elegir, mis ataduras son mentales, yo he elegido luchar, deseo ser madre de un hijo sano y fuerte y confío en ello y sobretodo confío en el ser que llevo dentro, él me ha demostrado su vitalidad y ganas de vivir, compartir la vida terrenal con nosotros, no debo con mis pensamientos generar otro resultado”. Por ello también hablo con mi cuerpo para que cada célula vibre en energía de salud y alegría, recorro cada parte de mi cuerpo con esta premisa para que así sea.
La comunicación con tu hijo se produce desde el momento que conoces o intuyes que forma parte de tu ser, por eso no dudes en hablarle, transmitirle pensamientos positivos, si desde el vientre materno nos están transmitiendo: amor, fuerza para salvar las dificultades y confianza en si mismo. ¿Qué clase de carácter estás generando en su ADN, qué predisposición tendrá ese ser cuando nazca y se enfrente a la vida? ¿Por qué esperar que nos entienda con palabras, que sepa razonar? podemos educar a nuestros hijos desde su formación, desde que son embriones, esos pensamientos son energía que les llega, cuantas veces en terapia nos han preguntado: ”¿ te ha contado tu madre como fue tu embarazo o nacimiento? Esta pregunta no es gratuita, la influencia de los padres es más allá de cuando tenemos un año, diría incluso que desde el momento que esa pareja decide tener hijos, cómo fue concebido.
Aunque dudemos de que estos pensamientos sean verdad o correctos, no hubiésemos preferido todos que desde pequeños nuestros padres nos hubiesen dicho: te amo, eres fuerte y confía en ti… ¿nuestra autoestima, capacidad de superación no hubiese sido bien distinta?. ¿Por qué no intentarlo?
Confiemos en nuestra intuición, con este embarazo, se ha multiplicado y ello me genera más confianza en mí misma, esa energía interna que emana desde dentro y sabes que va a pasar, a pesar del dolor y sufrimiento que padecí en ese viaje, creo que mi intuición conocía que lo iba a pasar mal pero el resultado ha sido tan maravilloso, he conseguido una excelente comunicación con el bebé que llevo dentro y una confianza que en que todo será como elijamos que sea, un mundo infinito de posibilidades se abre ante nosotros, disfrutemos del vuelo.
Eva López Boluda
Lee en este blog los otros artículos de Cuerpo-mente en el embarazo:
IV. Preparación de embarazo tras una pérdida
V. Habla con tus células. Conecta con tu bebé