Empodérate también a través del duelo.
Artículo publicado en origen en la web Mujeres empoderadas. Por Mónica Álvarez.
Ya sé que el título que he elegido es contradictorio. ¿Cómo va a ser empoderante algo tan trágico y tan triste como perder a tu bebé?
Voy a darte tres razones que te sacarán de dudas. O tal vez siembren más preguntas en tu interior. Cualquiera de las dos opciones son positivas.
1. El dolor emocional como camino iniciático.
2. El dolor vivido desde el cuerpo.
3. El dolor espiritual como puerta a un tipo de fortaleza más allá de lo que hubiéramos jamás imaginado.
1. El dolor como camino iniciático.
Vivimos en nuestra zona de confort. Vivimos cual ovejas pastando al sol, rumiando y disfrutando del pasto. Tenemos solucionada la comida, el abrigo, un techo bajo el que dormir. Los días se suceden unos a otros, con rutinas que hacen sencilla nuestra vida y acontecimientos que podemos prever fácilmente. De repente un día ocurre algo que se sale de lo ordinario, algo que nos saca de nuestra zona de confort, que nos obliga a movernos, a buscar, a hallar respuestas donde no las hay, a preguntarnos en cada momento cómo continuar adelante. Pues los pasos que dimos hace un momento no nos sirven para continuar nuestro camino.
Te invito a leer el resto del artículo aquí en la web original. Muchas gracias!
¡Empodérate! Descubre y amplía tu poder. Es el regalo que te hace tu hijo, ¿vas a rechazar su regalo?
Mónica Álvarez http://duelogestacionalyperinatal.com/accede-gratis-al-modulo-0/
alicia dice
Estoy totalmente de acuerdo con esta visión del duelo y con aceptar de este modo el regalo que nos han hecho nuestros hijos. Aunque al principio resulte imposible comprenderlo, el tiempo juega a nuestro favor si sabemos tomar el duelo como un proceso de transformación profunda en todos los órdenes de nuestra vida. Gracias, Mónica, por ponerlo de manifiesto.
Monica dice
Hola Alicia! Muchas gracias por tu comentario y por validar mis palabras. Es verdad que cuando nos sumergimos en el duelo (en cualquier duelo) no metemos en un túnel sin salida del que no sabemos si lograremos salir nunca. Un túnel oscuro, húmedo, lleno de ruidos extraños… Pero se sale. Y con la ayuda necesaria se puede salir fortalecida y empoderada.
Muchas gracias por acompañarme en este camino.
Un abrazo grande!
Mónica
cioly dice
Nunca sabemos lo fuerte que somos hasta que la única opción que queda es ser fuerte. Esto no se entiende a la primera, hay que llorar mucho pero mucho, luego entenderemos el porque de las cosas y así fortalecidas nos empoderamos del regalo
Monica dice
Es triste, terrible y maravilloso. Ojalá no tuviéramos nunca que pasar por ello. Pero ya que estamos, vamos a crecer, aprender, empoderarnos por ellos y gracias a ellos. Nuestros hijos.
Muchas gracias por tu comentario.
Mónica